Trailer Irene

jueves, 5 de junio de 2008

Conserva su puesto y le pagan la mitad del sueldo tras 15 años sin ir al trabajo

Un indio que llevaba quince años sin ir a trabajar ha conseguido que los tribunales obliguen a su compañía a mantenerlo en su puesto y pagarle la mitad del salario correspondiente a sus años de absentismo laboral, informó hoy la agencia IANS. Tras más de una década de litigios, el Tribunal Supremo ha dado la razón al ayudante de ingeniería aeronáutica S.N. Das, que "trabaja" para la Autoridad Aeroportuaria de la India (AAI), dependiente del Estado.

Das tenía un cargo de ayudante de ingeniero en el aeropuerto de Calcuta cuando en 1985 fue trasladado a Nueva Delhi. Asistió a su nuevo puesto pero pronto pidió 18 días de baja arguyendo que su abuela estaba enferma. Pasado este periodo, el ayudante de ingeniería bengalí no acudió a su puesto de trabajo y aseguró a la AAI que esta vez era él quien tenía problemas de salud.

Cinco meses después, la compañía decidió hacerle un examen médico y, al comprobar que estaba sano, le amenazó con el despido si no volvía al trabajo. Pero Das se negó en redondo y la AAI le dio un ultimátum: o cumplía sus obligaciones laborales o sería despedido.

El ayudante de ingeniero acudió entonces a los tribunales y en 1995 el Tribunal Superior de Calcuta ordenó a la AAI que lo readmitiera, aunque sin pagarle sus diez años de ausencia laboral. No contento con la situación, Das presentó un nuevo recurso aunque finalmente se reincorporó al trabajo en 2000.

El año pasado, el tribunal de Calcuta ordenó a la compañía pública que le pagara la mitad del salario de los 15 años que había faltado al trabajo, una decisión que ha ratificado este mes el Tribunal Supremo de la India.

Eso no pasa en España, por lo menos yo no he tenido tanta suerte.¿y tú?

Fuente:el Periódico Mediterráneo.

Dos gemelas separadas por error al nacer se reencuentran 28 años después

Imágen de gemelas, no las reales Dos gemelas prematuras, que fueron separadas por error al salir de la incubadora que compartieron con otra sietemesina, se reencontraron 28 años después al advertir el parecido de ambas una dependienta de un comercio de la capital grancanaria. Como consecuencia del intercambio, una de las gemelas fue a parar a otro hogar, cuya hija ocupó su lugar al lado de su hermana, informó el abogado que representa a una de las perjudicadas, Sebastián Socorro, quien reclama para su clienta tres millones de euros por los "enormes" daños morales causados, pues se la privó de vivir junto a la persona con quien compartió vientre materno.

Los irreparables daños causados a estas tres hijas y sus padres también han sido recurridos por las otras dos hermanas no biológicas y por la madre natural de las gemelas, informó Socorro. El fortuito reencuentro se produjo a finales de 2001 al presentarse la hermana gemela en un comercio, donde su clienta era conocida por una dependienta y, al dirigirse a ella, ésta le dijo que se estaba confundiendo con otra, explicó el abogado.

Como dos gotas de agua

La dependienta se lo contó a una amiga común de ella y la gemela que favoreció un encuentro de las dos hermanas biológicas, en el que se desvaneció por el asombroso parecido de las chicas. A raíz de la cita, comenzaron a indagar sobre su pasado y descubrieron que ambas nacieron en 1973 en el antiguo Hospital del Pino de la capital grancanaria, donde un error cambió por completo sus vidas y la de la otra prematura, según sostiene el letrado.

Las gemelas sólo han podido compartir como hermanas los 15 primeros días de su vida en el hospital, señaló el abogado, que presentó un recurso ante la Justicia, cuyas diligencias probatorias se practican en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 3 y está pendiente de sentencia, informaron hoy a Efe fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.

Después de que en 2004 se sometieron a las pruebas de ADN que demostraron su parentesco, Socorro reclamó al Servicio Canario de Salud los daños causados por el "terrible" error cometido, pero éste "dio la espalda al problema". Por silencio administrativo, decidió recurrir y el SCS en su contestación sólo admite una indemnización para las gemelas de 700 y poco más de 1.000 euros, en caso de que la sentencia les sea favorable, cantidades que Socorro considera "ridículas".

Desde el Servicio Canario de Salud no se quiere hacer manifestaciones al respecto hasta que se produzca la sentencia, indicaron fuentes del gabinete de prensa. Las dos gemelas quieren permanecer en el anonimato, pero son como dos gotas de agua, pues son genéticamente idénticas, como las de "Tú a Boston y yo a California", aunque su historia dista mucho de esta película, en la que dos niñas de asombroso parecido se conocen en un campamento y descubren que son hermanas y que sus padres al separarse decidieron quedarse cada uno con una.

En la película las gemelas deciden, al concluir el campamento, intercambiar sus papeles para conocer a sus padres, sin embargo la realidad de estas niñas es otra, pues la que fue separada de sus progenitores no conocerá a su padre, ya que murió antes de producirse el reencuentro fortuito. Además, en esta historia real existe también otra niña perjudicada, la que ha crecido creyendo ser gemela y que en la prueba de ADN a la que también se sometió se demostró que no guardaba ninguna relación biológica con su supuesta hermana.

Típica escena de telefilm de sobremesa, lo peor de todo es que es cierto.

Fuente:El periódico Mediterráneo.